Las plantas aportan belleza y frescura al hogar, además de beneficios para la salud: purifican el aire, disminuyen el estrés y generan un ambiente más agradable. Sin embargo, cuando hay mascotas en casa, esta decoración puede convertirse en un riesgo, ya que los perros y gatos, por curiosidad o juego, suelen morder hojas, bulbos o frutos que para ellos son tóxicos.

Los veterinarios advierten que incluso las especies comunes en interiores y patios pueden provocar desde irritaciones leves hasta problemas graves en el sistema digestivo y nervioso. Por eso, es fundamental que los dueños de animales identifiquen cuáles son las peligrosas y tomen medidas preventivas, manteniéndolas fuera del alcance o sustituyéndolas por alternativas seguras.

¿Por qué algunas plantas son peligrosas para perros y gatos?

Algunas de las especies más comunes en hogares y patios contienen compuestos químicos que los animales no pueden metabolizar, lo que las convierte en un gran peligro.

Aloe vera

Aunque es muy valorado por sus propiedades medicinales en humanos, tiene una savia amarillenta debajo de sus hojas que puede provocar vómitos, diarrea y fuertes irritaciones en la piel y mucosas de perros y gatos si la ingieren o la lamen.

Anturio

Conocido como flor de flamenco, contiene oxalato cálcico, un compuesto que inflama las membranas de la boca, la lengua y la garganta. Esto puede causar dolor, hinchazón facial y salivación excesiva, llegando incluso a dificultar la alimentación y la respiración si el animal ingirió demasiado.

Azaleas

Representan un riesgo mayor: pequeñas cantidades pueden generar vómitos, alteraciones del ritmo cardíaco, convulsiones y pérdida de control muscular. Su toxicidad hace que cualquier contacto o ingestión accidental deba considerarse una emergencia veterinaria.

Bulbos ornamentales

Los bulbos de tulipanes, narcisos o jacintos, concentran sustancias irritantes bajo tierra, lo que los convierte en una trampa para cachorros y animales curiosos que suelen morderlos o excavarlos. Esta acción puede derivar en diarrea y dermatitis, especialmente en los animales más jóvenes.

Plantas decorativas

Aquellas como el croton contienen látex y compuestos que provocan vómitos, irritación oral e hinchazón de la cara al ser mordidas o tocadas por las mascotas.

Jazmín del Paraguay

Es especialmente peligroso por sus frutos y semillas, ya que los alcaloides y glucósidos que contienen pueden afectar gravemente el sistema nervioso y digestivo, generando temblores, convulsiones e incluso dificultades respiratorias que puede poner en riesgo la vida de nuestros compañeros de cuatro patas.

Los síntomas más comunes de intoxicación en mascotas

Cuando un perro o un gato entra en contacto con una planta tóxica, los efectos pueden manifestarse de manera rápida y variada. Generalmente, los primeros signos aparecen en el sistema digestivo, con vómitos, diarrea, dolor abdominal y pérdida del apetito.

La irritación también puede afectar la piel y las mucosas, provocando salivación excesiva, hinchazón de la lengua o del rostro, y dermatitis de contacto que genera molestias. A su vez, muchas plantas afectan el sistema nervioso de los animales, produciendo temblores, convulsiones y pérdida de coordinación, lo que se traduce en caídas, tropiezos y dificultad para moverse.

En casos más graves, la ingestión de ciertas especies puede impactar la respiración, causando problemas a la hora de inhalar, y llevar a la muerte si no se actúa de inmediato.

Por eso, los especialistas advierten que, ante cualquier síntoma inusual, acudas de manera urgente al veterinario. Además, llevar una muestra de la planta ingerida o fotografiarla puede ser de gran ayuda para determinar el tratamiento más adecuado.

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