Centroamérica y Unión Europea estrenan alianza

#

La Unión Europea y 6 países centroamericanos —Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá— celebraron este lunes en Bruselas la primera reunión del Consejo de Asociación UE-Centroamérica, un hito histórico en el marco del Acuerdo de Asociación que entró en vigor el 1 de mayo de 2024, tras más de una década de aplicación parcial de su pilar comercial.

El encuentro fue presidido por la Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Kaja Kallas, y por el ministro danés Lars Løkke Rasmussen, en calidad de presidente del Consejo de la UE. Por Centroamérica asistieron, entre otros, los cancilleres Arnoldo André Tinoco (Costa Rica), Alexandra Hill Tinoco (El Salvador), Carlos Ramiro Martínez (Guatemala), Javier Eduardo Martínez-Acha (Panamá), así como viceministros de Honduras y Nicaragua.

La cita ministerial permitió un amplio intercambio sobre los principales desafíos globales que afectan a ambas regiones, como las tensiones geopolíticas, los conflictos armados y las crisis humanitarias, además de temas centrales de la agenda birregional, incluidos comercio, inversión, migración, seguridad y lucha contra el cambio climático.

El Acuerdo de Asociación entre la UE y Centroamérica fue suscrito en 2012 y su componente comercial empezó a aplicarse de manera provisional ese mismo año, contribuyendo de manera sostenida a incrementar los flujos económicos entre ambas regiones.

Según datos oficiales, el comercio bilateral pasó de 8.700 millones de euros en 2012 a 22.000 millones en 2023, con un notable auge de productos agrícolas e innovadores. Para algunos países centroamericanos, hasta el 90% de sus exportaciones agroalimentarias tienen como destino el mercado europeo.

Los ministros coincidieron en que este progreso confirma el potencial del acuerdo como motor de desarrollo, aunque enfatizaron la necesidad de fortalecer el diálogo político y de cooperación para hacer frente a retos transversales.

Durante el encuentro, los participantes reiteraron su adhesión a los valores compartidos de democracia, respeto de los derechos humanos y del derecho internacional. También reafirmaron su compromiso con el multilateralismo y la Carta de las Naciones Unidas, así como con la defensa de la soberanía, la integridad territorial y el estado de derecho, en un contexto global marcado por tensiones y desafíos a las normas internacionales. Aunque reconocieron diferencias de enfoque en cuestiones específicas, las dos partes subrayaron la importancia de mantener un diálogo regular y constructivo.

Otro de los ejes fue la urgencia de intensificar la cooperación ante el cambio climático, la degradación ambiental y la pérdida de biodiversidad. Ambas regiones se comprometieron a impulsar esfuerzos conjuntos para la transición energética, la protección de los océanos, el fortalecimiento de la gobernanza ambiental y la reducción de los riesgos climáticos que afectan de manera desproporcionada a Centroamérica.

La Agenda 2030 de Naciones Unidas seguirá siendo el referente común, con prioridad en inclusión social, seguridad alimentaria, energía limpia y digitalización. En este sentido, se destacó el papel de la Global Gateway Investment Agenda, una iniciativa europea orientada a movilizar inversiones públicas y privadas en sectores estratégicos como educación, salud, infraestructuras energéticas, conectividad digital y cadenas de valor locales.

Los ministros también enfatizaron el potencial del Mercado Eléctrico Regional Centroamericano como plataforma de integración y crecimiento, comprometiéndose a reforzar los marcos de cooperación en materia de energía sostenible.

Perspectivas de diálogo y próxima reunión en la región

El Consejo de Asociación acordó convocar periódicamente los Comités de Asociación y Subcomités de Cooperación, con el objetivo de alimentar los debates técnicos y preparar la próxima reunión ministerial, prevista para celebrarse en un país centroamericano en 2027.

Asimismo, se resaltó la importancia de promover el contacto directo entre pueblos, empresas y organizaciones de la sociedad civil, con el propósito de acompañar la implementación del Acuerdo de Asociación y acercar sus beneficios a las poblaciones de ambas regiones.

La UE es actualmente el tercer socio comercial de Centroamérica y uno de sus principales cooperantes históricos. El Acuerdo de Asociación aspira a consolidar esa relación, reforzando los lazos políticos, económicos, sociales y culturales que unen a los más de 500 millones de ciudadanos europeos y centroamericanos.

(CA 360)

Live Comment

Your email address will not be published.