Ante el inicio de la temporada de lluvias, se han reforzado las acciones preventivas para proteger la vida y el patrimonio de los salvadoreños.

Como parte de esta estrategia, se han adecuado y equipado albergues en distintos puntos del país, con el objetivo de ofrecer resguardo seguro a quienes necesiten evacuar temporalmente sus hogares. Estos espacios han sido acondicionados con camas, alimentación, kits de higiene y atención médica, garantizando condiciones dignas para los afectados durante su estadía.

«El año pasado tuvimos 122 albergues activos a mediados de junio, fueron específicamente 4,200 personas las que se atendieron, un aproximado de 1,594 familias. Actualmente, tenemos una cifra muchísimo menor, seis albergues, 112 personas albergadas, 43 familias, entre ellos 67 adultos y 45 menores de edad», informó el director de Albergues, Josué García, sobre la atención a la alerta amarilla por lluvias, emitida el pasado 16 de junio.

De los seis albergues, cuatro están ubicados en San Salvador (dos por parte de la alcaldía de San Salvador), uno en La Libertad y uno en Morazán. García indicó que se está incrementando la capacidad instalada y acercando los puntos de atención a los lugares que se requiere.

“El Gobierno del presidente Bukele ha estado destinando mucho porcentaje de presupuesto para atender tanto a nivel social, como preparativos, antes de los eventos que hemos estado teniendo”, subrayó.

El funcionario afirmó que están equipando más albergues, contando con 180 adecuados, en todo el país, a fin de tenerlos listos para cualquier momento en que sea necesario activarlos, ante las diferentes situaciones de emergencia que puedan presentarse en el territorio.

Estas acciones forman parte de una política de gestión de riesgos centrada en las personas.